El Ayuntamiento de Pozuelo manipula las cifras de criminalidad sin cortarse un pelo

Un modo de influir en la opinión pública es a través de la manipulación estadística. Esta disciplina es ya de por sí una herramienta para acoger la verdad en función de los propios intereses, pero cuando además los datos se retuercen de manera torticera conllevan un menosprecio del receptor, votante, lector...

Decía el Ayuntamiento en una reciente nota de prensa que “Pozuelo de Alarcón sigue siendo una de las ciudades más seguras de España”, y aseguraba además que “descienden los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria en más de un 35%” y que “se ha registrado un descenso de los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, de un 1,4%, y de los robos con fuerza en domicilios, de un 1,8%, con respecto al mismo periodo de 2020”.

Y todo esto es verdad, bueno es una verdad a medias. Porque al Consistorio se le ha pasado consignar, según la misma estadística, que aumentan un 100% los asesinatos, un 83,9% los robos con violencia e intimidación, un 19,5% los hurtos, han aumentado un 24,1% las sustracciones de vehículos y un 18,2% el tráfico de drogas. Si, todo esto en Pozuelo.

Destacar solamente los datos que te convienen en una estadística se llama manipular, y las consecuencias que extraes de una estadística sesgada son, sencillamente, mentiras. A sabiendas, claro está. Porque no es un dato el que se manipula, sino la estadística en su conjunto.

A la luz de una visión global de estos datos de criminalidad, ¿algún ayuntamiento con un mínimo de seriedad puede afirmar con noble intención que es una de las ciudades más seguras de España?

Creo que la alcaldesa nos toma por tontos o por imbéciles. Sin embargo, más del 50% de los pozueleros tienen estudios superiores, lo que algunos gobernantes no tienen, y son capaces de sacar sus propias conclusiones y consultar sus propias fuentes. Y de votar en conciencia.

Propongo al Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón como ejemplo de manipulación estadística. O mejor, propongo instaurar un premio a la manipulación estadística que lleve el nombre de Pozuelo, como ciudad ejemplar en estos tejemanejes.