Metro Ligero alcanza siete millones de viajeros y dos millones de kilómetros en su primer año

La comodidad no es el único factor que hace de Metro Ligero el transporte más seguro y eficiente de todos los que existen en nuestro mundo desarrollado, es también el más económico y uno de los más ecológicos porque no contamina el medio ambiente. Alrededor del 70 u 80% de usuarios de Metro Ligero son del oeste de la región, es decir Pozuelo de Alarcón y Boadilla del Monte.

Estos datos se desprenden de un estudio realizado por el Consorcio Regional de Transportes de Madrid entre los usuarios de las líneas ML2, que une Pozuelo de Alarcón con la línea 10 de metro y ML3, que comunica Colonia Jardín con Boadilla del Monte.

Los resultados del estudio apuntan que en este primer año de vida, el Metro Ligero ha recorrido más de 2 millones de kilómetros, distancia equivalente a ir y volver tres veces a la luna y su demanda diaria se ha multiplicado por tres, llegando a los 7 millones de usuarios.

El día que más usuarios registró, 35.000 personas acudieron a la Estación de Colonia Jardín, principalmente de Pozuelo y Boadilla. De esta forma la estación se convierte en una de las principales paradas de origen y destino, abarcando entre el 70 y el 80% de la demanda total.

Las dos líneas han conseguido una puntuación de 8 en la valoración de sus cifras de velocidad media, que alcanza los 24 kilómetros por hora, su índice de puntualidad, que llega al 99%, además de su comodidad y eficacia.

La valoración global de Metro Ligero es de 7,79 sobre 10 en aspectos como seguridad, funcionamiento, comodidad, atención al cliente y accesibilidad.

El usuario de Metro Ligero es una mujer de 33 años, que utiliza este trasporte para ir a su trabajo entre 13:00 y 17:00 horas y entre 17:00 y 21:00 horas con el abono de transportes, medio de pago elegido por tres cuartas partes de los viajeros.

Además el estudio deduce que en este primer año de vida el 17,4% de los usuarios de la línea ML3 ha sustituido el coche por el Metro Ligero y el 13% en el caso de la ML2. De esta forma y con la sustitución de los automóviles por los raíles, contribuimos a mejorar en la lucha contra el cambio climático.