Los alumnos del Cluny ISEIT se manifiestan por sus derechos
Un título sin homologación
El Centro Universitario lleva funcionando hace ya casi 50, los seis últimos en Pozuelo. A pesar de no estar homologados en España, desarrolla un plan de estudios muy completo y exigente que lleva a la obtención de 2 títulos franceses "Lettres Modernes" y "Traducción e Interpretación’
A pesar de ser consciente de esta particularidad, según declaraciones de Virginia Andújar de la Asociación de Antiguos Alumnos, desde la gerencia se utilizaba como gancho para los futuros alumnos que estaban en trámites de homologación. Algo que según Virginia, ‘era falso’, es más, una vez que el Director D. José Luis Bazán consiguió un acuerdo para homologar la carrera de a través de un curso puente con una Universidad española, ‘la Congregación decidió de manera unilateral, sin previo aviso romper el acuerdo de homologación y cerrar el Centro’.
Por estos motivos, la Asociación de Antiguos Alumnos se está planteando presentar acciones legales.
Alumnos sin material A pesar de que la Congregación declaró su intención de cerrar el centro, esto no fue posible debido a la exigencia legal de que todos aquellos alumnos que hubiesen iniciado sus estudios universitarios tienen derecho a finalizarlos en el mismo centro.
Todos los alumnos del centro realizan estos días huelga para protestar por la mala gestión y el deterioro de los servicios del centro desde que se anunció el cierre. ‘Llevamos tres meses sin biblioteca y nos hacen pagar lo mismo; no tenemos profesores que acepten nuestras tesinas para terminar la carrera’ afirmaba una de las alumnas en huelga.
Sin embargo, desde la Congregación se afirma que el cierre del centro se está haciendo de manera totalmente legal y se afirma que existe una ‘manipulación’ de los alumnos.
Trabajadores sin Seguridad Social
En declaraciones al Diario de Pozuelo, Jose Luís Bazán, director del Centro Cluny ISEIT, afirmó que ‘todo el personal docente recibe su salario de manera correcta’ pero muchos de ellos han estado más de veinte años sin cotizar en la Seguridad Social, ‘algo que repercutirá de forma negativa a la hora de la jubilación’.
Tras el anuncio de cierre del centro el pasado mes de mayo, la Gerencia pretendió realizar un Expediente de Regulación de empleo para despedir a todos los empleados, algo que no les fue posible legalmente. A día de hoy no se ha planteado ninguna otra solución a la situación laboral de los más de 40 empleados del centro.
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