Julio Aparicio corta dos orejas y sale por la puerta grande de la Plaza de las Américas

Julio Aparicio es el primer torero que ha salido por la Puerta Grande de la Plaza de las Américas en Pozuelo de Alarcón. A lo largo de su primera faena el público, sobre todo las peñas, gritaban que el toro que salió a la plaza no tenía la suficiente bravía. Necesitó un aviso el maestro porque el tiempo apremiaba y tenía que entrar a matar, tras el que el público estalló en aplausos.

Pero fue en el segundo toro que lidiaba, el cuarto de la tarde, que se llamaba Espartero y era un toro cárdeno de 495 kilos, cuando el público pidió las orejas, la presidencia la concedió y el matador y su cuadrilla las pasearon por el ruedo.

A pesar de lo flojos que resultaron los toros de Carmen Segovia en esta corrida, los toreros hicieron faenas destacables. Como el toreo a la verónica de Alejandro Talavante, del que pudo disfrutar la afición taurina en la Plaza de las Américas. Talavante faenaba con la muleta por el pitón derecho en la mayor parte de los pases y al entrar a matar. Su segundo toro, quinto de la tarde, era muy manso y flojo y a pesar de ello recibió aviso de la presidencia y silencio tras él, tanto en su segunda faena como en la primera.

Ángel Teruel, de color blanco y oro, entró a la plaza con gallardía, pero a pesar de ello recibió dos avisos de la presidencia para que entrara a matar. Teruel consiguió algunos muletazos a los que el público respondía con un «olé» al unísono aunque, de nuevo la ganadería de Segovia mostraba menos bravura de la que el público esperaba.

En su primera faena consiguió cortar una oreja y dar la vuelta al ruedo. Sin embargo, Teruel en su segunda faena, hizo un espectacular quite por chicuelinas al toro y varios muletazos con mucha elegancia que bien podrían haberle hecho merecedor de una oreja, pero su fallo en las espadas con el sexto de la tarde, echó atrás la vuelta a la plaza.

Tras la corrida, Julio Aparicio salió por la puerta grande de la pozuelera Plaza de las Américas a hombros de su cuadrilla y saludando a su público, que le jaleaba desde el tendido por el espectáculo del día.

Las que no pueden faltar, ni en una crónica taurina ni en la plaza de toros en época de fiestas, son las peñas, que fueron las que a lo largo de toda la jornada taurina, tocaron más canciones, allí estaban las peñas de Pozuelo, de nuestro municipio 'Seis y medio', 'Los mingas', 'El albero' y 'El botijo' animando a los toreros, sacando pañuelos blancos y pidiendo orejas y rabo en una tarde de toros en honor a Nuestra Señora de la Consolación.