Cuatro agentes imputados por una supuesta agresión policial

Según el diario ABC, el pasado 11 de octubre en la Estación de Cocheras de la línea 3 de Metro Ligero, que recorre el trayecto desde Colonia Jardín hasta Boadilla del Monte, aproximadamente a las 2.30 de la madrugada, a su paso por la localidad pozuelera un hombre que se encontraba caminado por las vías del metro, asegura haber sido victima de agresiones por parte de cuatro agentes de la policia.

Los agentes de policía acudieron a la zona a instancias de los empleados de metro que en un primer momento instaron al hombre para que cejase en su actitud, pues no solo ponía en riesgo el funcionamiento del servicio de transporte, si no también su propia integridad.

En las diligencias policiales queda patente que tras un primer aviso el hombre abandonó las vías, pero más tarde volvió a subirse a los raíles del tranvía. Es entonces cuando la Policía Local de Pozuelo se presentó debido a la actitud violenta y hostil de este hombre de 45 años y vecino de la localidad, citando algunas fuentes que incluso arrojaba piedras contra los vagones. En el atestado policial no deja claro si el agredido se encontraba bajo la influencia de alguna sustancia o si padecía de algún tipo de enajenación mental.

Los agentes le reprendieron por su actitud y, al ir a reducirle, los imputados indicaron que fueron agredidos verbalmente de forma reiterada. Consta además que uno de los agentes fue escupido por lo que éste y sus compañeros habrían reaccionado violentamente golpeándole. Subrayan que al no producirse lesiones y al haber podido desalojarle de la zona, dieron por terminada la intervención.

La víctima y el oficial jefe de la Policía Local de Pozuelo de Alarcón interpusieron una denuncia a los cuatro agentes que han sido suspendidos de empleo y sueldo por el Ayuntamiento de la localidad hasta que se esclarezcan los hechos. El caso ya está en manos de la autoridad judicial, que además posee la cinta de video que recoge los hechos de esa noche.

Desde que el cuerpo de policía Local de Pozuelo tuvo constancia de los hechos puso en marcha una investigación interna. El portavoz de la policía defiende la actuación de los agentes, pero no así la manera de proceder a la hora de realizar las posteriores diligencias, puesto que "se tenía que haber detenido a esa persona por alteración de un servicio público y desobediencia a la autoridad".