Codere una de cal y otra de arena

Codere, la empresa dedicada a los casinos y juegos online de nuestro mercado de valores, ha frecuentado las noticias en la prensa en las últimas semanas.

A principios de octubre, los tribunales británicos aceptaron la propuesta de financiación que había presentado la empresa para conseguir una necesaria liquidez. En ella, se sugería la posibilidad de refinanciar las deudas de Codere UK y Codere Finance 2 mediante una nueva emisión de 165 millones de euros.

De esta manera, la empresa conseguía una inyección de efectivo que le puede permitir continuar con sus actividades. Este balón de aire no solo es importante por la situación financiera individual de la empresa, sino también por las repercusiones que la pandemia sanitaria está teniendo en todo el sector de la hostelería y en concreto en salas de juego y casinos.

Aunque Codere cuenta con una potente página web que ofrece servicios de casino online y apuestas deportivas, la importancia de los servicios físicos es preponderante: más de 145 salas de juego, 7 600 puntos de apuesta y cuatro hipódromos lo atestiguan. Actividad que no solo se lleva a cabo en España, pues tienen presencia en países como Italia, Panamá, Colombia, Brasil, México, Uruguay y Argentina.

Precisamente de Argentina han llegado también buenas noticias últimamente. La Lotería de la Ciudad de Buenos Aires aprobó el Programa de Implementación de la Plataforma de Juego Online de la empresa, en lo que supone el primer paso para conseguir la licencia para operar en Buenos Aires y aumentar así su presencia en el mercado latinoamericano.

Por otro lado, no todo han sido noticias positivas. Hace unos días la agencia de calificación Standard & Poor´s rebajó la nota crediticia de la empresa a “impago selectivo”. En realidad, era previsible, pues la bajada se debe al efecto de la refinanciación de la deuda antes mencionada en la metodología utilizada por Standard.

Una semana después, el Tribunal Supremo ratificaba la sanción impuesta por la CNMV por haber falseado sus cuentas en el año 2012. No obstante, se debe tener en cuenta que, para una empresa del tamaño de Codere, esta sanción no es demasiado relevante pues “solo” asciende a 100 000 euros. Para que se haga una idea el lector, la sanción se debía a que la empresa reformuló sus cuentas del 2012 rectificando las pérdidas declaradas de 104,6 millones de euros a los 134 millones que declaró finalmente. La diferencia se debía, según la empresa, a un error contable.

Actualmente, las acciones de Codere cotizan en 1,29 euros y parecen haber entrado en un amplio movimiento lateral entre 1,13 y 1,49. Esto supone algo de oxígeno para una cotizada que llegó a tocar los 0,81, pero que todavía queda lejos de los 3,3 a los que llegó a cotizar a principios de año.