El Ayuntamiento de Pozuelo mejorará el entorno de la Cruz de la Atalaya

El Gobierno municipal de Pozuelo de Alarcón va a mejorar la zona verde de la Cruz de la Atalaya, tras adjudicar la Junta de Gobierno Local, en su sesión del pasado miércoles, la contratación de las obras, con las que se mejorará este espacio natural para los vecinos y se contribuirá a la mejora estética del entorno.

También se adecuará el camino de la Cruz de la Atalaya y se reforestará el Parque forestal del mismo nombre con lo que se mejorará la movilidad, a través de un entorno agradable, entre las zonas oeste de Pozuelo y el campus universitario de Somosaguas. Para este acondicionamiento se tendrán en cuenta técnicas y criterios para reducir, tanto el consumo de recursos, como las tareas de mantenimiento para no perder el estado natural en el que actualmente se encuentra.

Las actuaciones a realizar en este entorno van desde la creación de un camino con cuneta a ambos lados y la construcción de una red de drenaje e instalación de fuentes y papeleras, hasta la colocación de señalética en el camino para facilitar la orientación de las personas que transiten por el parque, plantación para favorecer la sombra a lo largo del camino y reforestación de la zona con especies autóctonas.

La alcaldesa de la ciudad, Susana Pérez Quislant, ha destacado la importancia de esta mejora “que proporcionará un espacio más agradable para los vecinos de Pozuelo y con la que también contribuimos a mejorar y preservar el medio ambiente”. En este sentido cabe destacar que se reducirá la contaminación acústica, actuando como pantalla entre carreteras y la zona residencial, se mejorará la calidad paisajística y estética del entorno y se convertirá en un espacio para deporte al aire libre del que podrán disfrutar los vecinos tanto a pie como en bicicleta.

En el centro de este parque forestal de Cruz de la Atalaya se emplaza el monumento de la Cruz de la Atalaya que da nombre al Parque Forestal. Es el monumento más antiguo de Pozuelo erigido en granito en el año 1731 por el señor De la Torre, caballero de la Orden de Santiago.