El inicio de las rebajas provoca una oleada de compradores

Las rebajas han comenzado. El pasado 21 de junio los pequeños comercios de Pozuelo iniciaron el periodo de rebajas con unos descuentos que les han permitido incrementar sus ventas entre un 20 y un 25%, con respecto al mes de junio del pasado año. Las grandes superficies, por su parte, esperaron hasta el día 1 de julio para iniciar sus descuentos, unas reducciones que se mantendrán hasta el próximo 21 de septiembre, fecha en la que expira el periodo de rebajas.

El concejal de Consumo del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón, Félix Alba, recomienda a los usuarios que «en época de rebajas hay que ir al pequeño establecimiento porque los descuentos suelen ser más sustanciosos». Sin embargo, reconoce que principalmente se compra en grandes superficies.

Buen ejemplo de ello es el Hipercor de Pozuelo. Este centro comercial registró un cuantioso número de visitantes en su primer día de rebajas. Su director, Óscar González, cifró en 20.000 el número de visitantes durante su intervención en el programa Pozuelo se Mueve de Cauro FM. Esta avalancha no pilló por sorpresa a Alba, quien reconoció que los pozueleros se caracterizan por acudir «muy rápido» a las rebajas.

González afirmó que el cliente de Pozuelo presenta un perfil muy concreto, ya que busca más las marcas internacionales de mujer, aunque no desdeña en absoluto las firmas de caballero. Sin embargo, Alba defiende un «consumo responsable» debido a que «una parte importante de la paga extraordinaria se va en las rebajas».


Evitar compras compulsivas

La Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) apoya el consejo del concejal de Consumo y recomienda evitar las compras compulsivas. Además, sugiere evitar aglomeraciones, exigir idéntica calidad pese a la rebaja, concretar antes de la compra las posibilidades de cambio, no aceptar artículos con taras y  solicitar el ticket de compra.A ello se suma la normativa vigente en materia de rebajas. En ella se estipula que los artículos rebajados deben formar parte de las existencias del establecimiento al menos con un mes de antelación. En lo referido a la presentación de los precios, en las etiquetas debe aparecer tanto el precio rebajado como el anterior de manera clara y sin que se pueda incurrir en equívocos.No obstante, en caso de incumplimiento de la normativa se recomienda a los usuarios que hagan uso de las reclamaciones que existen a su disposición. Unas solicitudes que, en palabras de Alba, «en rebajas pueden aumentar un poco más, pero va en relación al aumento de las compras». Sin embargo, asegura que «todas las reclamaciones se tramitan y no hay ninguna que se quede fuera de contestación».El verano dictará sentencia y demostrará si los establecimientos cumplen con las condiciones exigidas o si, por el contrario, en las rebajas impera el 'todo vale'.