Pablo Gil y el estacionamiento de Schoenstatt
Hace unos meses denunciamos que en el estacionamiento que hay enfrente de Schoenstatt había un bordillo al principio de las escaleras que bajan a la acera.
Esto era muy peligroso ya que cada día acuden familias para llevar al colegio a sus niños pequeños y era fácil tropezar. Ahora se ha eliminado el bordillo así que hay que felicitar a la concejalía de Obras e Infraestructuras y a su responsable, Pablo Gil, por esta actuación.
Sin embargo se puede hacer más. Para bajar del estacionamiento a la acera hay dos escaleras, una ya se ha acondicionado, pero la otra continúa con el bordillo. También sería interesante poner en todo el borde del parking una valla de seguridad. Cualquier día un niño puede tropezar y caer directamente a la carretera.
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