A Pozuelo no lo va a reconocer ni la madre que lo parió

¿Te acuerdas de lo que dijo Alfonso Guerra cuando el PSOE llegó al poder? Quizá, amigo lector, seas demasiado joven. Aquel 28 de octubre de 1982 el que iba a ser vicepresidente del Gobierno de Felipe González afirmó eufórico “Vamos a poner a España que no la va a reconocer ni la madre que la parió”.

Y así fue. Aunque otro vendrá que bueno te hará. Porque después tuvimos a Zapatero, y después -ufff- a Pedro Sánchez… y terminaron de reventar esta piel de toro.

Pero yo no quería hablar de ello ahora. Buscaba hacer un paralelismo con Pozuelo. No sé si tal frasecita la podría sustentar ahora la alcaldesa Quislant o su apoyo naranja Damián Macías. Pero lo cierto es que tal afirmación podría haber salido de la boca de uno de estos dos políticos.

Lo digo porque paseando por el Parque Prados de Torrejón, en pleno Pozuelo Estación, uno se topa con lo más parecido a una casa ocupa del Bronx, y a ningún responsable del Ayuntamiento parece preocuparle. A ninguno.

El quiosco de titularidad municipal que se encuentra en ese parque ya no es tal. Ahora es un lugar para distracción de jóvenes grafiteros y gamberros que han asaltado la caseta y han roto todos sus cristales. Como rótulo hilarante aparece un “Próxima apertura de la Taberna del Alabardero. Grupo Lezama”. Lleva tres años puesto el cartelito.

Y a este Ayuntamiento parece darle igual. Cada vez más pintadas, cada vez más cutrerío, cada vez más descuido…

Definitivamente, a Pozuelo ya no lo va a reconocer ni la madre que lo parió.