La Perejil

Debo reconocer que África Sánchez, la Concejal de Cultura, Relaciones Institucionales y Protocolo, es mi perdición.

Hubo un tiempo en que vivía en un sin vivir intentado que Jacobo de María me contase cómo era su bikini. Incluso, recuerdo que le pregunté, públicamente, si era de rayas como el de Eva María, aquella que se fue buscando el sol en la playa, o si era un tanga como uno que llevaba una vez Eva Mendes o Eva González, que no me acuerdo bien cuál de las dos... ¿O era Eva Longoria? No lo sé. Es igual. Las evas en bikini o en tanga me han llevado siempre por la calle de la amargura. Pero Jacobo nos abandonó como se abandonan dos zapatos viejos, y yo tardé, en aprender a olvidar el bikini de África, diecinueve días y quinientas noches. (Vuelve Jacobo, sic transit gloria mundi).

Pero de aquellos polvos (con perdón) vienen estos lodos. ¿Y qué quiero decir con esta famosa frase hecha? Quiero decir que, pese a llevar quinientas noches intentando averiguar algo de la vida de África Sánchez para hacerle un buen retrato con el que adornar mi Galería de concejales, no he podido saber casi nada sobre su ella. Es más, lo único que he podido comprobar es que África Sánchez es al Ayuntamiento lo que el perejil a las salsas. Está en todas ellas pero también es prescindible en todas.

África es Concejal de Cultura. Punto. Y digo punto pero no he podido comprobar en base a qué la nombraron y en base a qué se sustenta en el cargo. Tiene Estudios de Secretariado Internacional y Marketing, lo cual es muy digno, pero no sé yo si eso es suficiente bagaje como para llevar adelante una labor como la que exige un Pozuelo de Alarcón que va por la vida de Gran Centro Cultural. (¡Ese pedazo de Mira que casi se ha convertido ya en el Bolshoi del noroeste de Madrid!) Pero, insisto, si un bachiller puede llegar a ser Molt Honorable President de la Generalitat de Catalunya, ¿quién soy yo para cuestionar la labor de África?. Y si Carmen Calvo llegó a Ministra de Cultura del Gobierno de España, ¿quién soy yo para cuestionar su nombramiento? Estoy seguro de que el Olvidable tuvo un par de razones de peso, como poco, para nombrarla en su día concejala. Es más, la definición de cultura es muy amplia. Tan amplia que, incluso, una serie de TV podría considerarse cultura. Y en eso, la señora Sánchez, me dicen, es una gran especialista...

África es concejal también de Relaciones Institucionales. Punto. Y vuelvo a decir punto porque, aunque supongo que será un cargo muy importante ya que deberá prestar tanto asesoramiento técnico como apoyo administrativo a las actuaciones del Ayuntamiento en sus relaciones con otras instituciones públicas o privadas, nacionales o internacionales, formalizadas mediante convenios, tramitando y realizando su seguimiento activo, e informando de las acciones particulares que los mismos desarrollan, desconozco que el Ayuntamiento de Pozuelo tenga tanta necesidad de todas esas cosas como para tener una concejalía. Y más que esa concejalía esté bajo la supervisión de África Sánchez. Pero no voy a ser yo quien cuestione a la señora Sánchez. Hay gente que tiene una capacidad especial e intuitiva para las relaciones institucionales y ella puede ser una de esas personas.

Por último África es Concejal de Protocolo. Y aquí digo punto y coma. Es lo correcto. Y correcto es decir que en esa labor si que es una mujer importante y puntillosa. Sus buenos modales y su buen hacer son famosos en todo Pozuelo. Y ejemplos de ello hay por doquier. Incluso, aquella vez que los redactores de este Diario de Pozuelo se sintieron ofendidos en un pleno del Ayuntamiento porque les llamó la atención en un intento (dicen los malpensados) de censurar su labor, ella lo único que estaba haciendo era cumplir con su papel protocolario. Aquellos periodistas no iban lo suficientemente bien vestidos para la ocasión y había que llamarlos al orden. Pero nada más. Lo que pasa es que los periodistas no la entendieron bien y creyeron que les censuraba.

Como tampoco entiendo yo bien qué vio en ella el Olvidable cuando la nombró Concejal de Cultura, Relaciones Institucionales y Protocolo estando como estaba, tan ricamente, de Concejal de Urbanizaciones en la legislatura pasada. Anda que no iba y venía ella con su fantástico coche por las susodichas urbanizaciones...

Pero las cosas que hacía el Olvidable eran tan inescrutables como los caminos del Señor. O tan inescrutables como la vida laboral de África Sánchez antes de ser concejala.

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