Carlos Ulecia y su “por qué no te callas”
En el pasado Pleno municipal de este mes, al concejal Carlos Ulecia le traicionó el subconsciente. Y se hizo lo que se conoce como un Juancarlosrey. Y le salió la autoridad, y la furia. No quiso, pero salió. Pidió perdón a Helio Cobaleda, pero no así a Maite Pina, que es a quien mandó callar. Hubiera sido más elegante hacerlo así, pero en fin.
No es muy democrático mandar callar al contrincante político. Quizá no era su turno, y para desarrollar un argumento hace falta que te dejen hablar. Pero lo de “cállese” sólo lo puede hacer el rey Juan Carlos ante un dictador y en ese caso no queda mal: todo lo contrario.
Pidió perdón Ulecia, pero le traicionó el subconsciente, le salió la mano dura. Espero que este hecho no fuera la manifestación de una falta latente de talante democrático.
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