El Parque Arroyo de las Cárcavas está muy descuidado
Escribe a mi buzón una vecina indignada. Dice, y describe con cierta exhaustividad, que el Parque Arroyo de las Cárcavas es una auténtica vergüenza. Que está sucio, lleno de maleza, con cagadas perrunas por doquier, con perros sueltos por sus dueños a pesar de la señalización que lo prohíbe. Y, pásmate, con un 70% de las farolas apagadas o fundidas, lo que le da una intimidad especial cuando se pasea al anochecer, que, combinado con las heces perrunas, lleva a que el paseante experimente una sensación extraña de suerte y de cabreo cuando llega a casa y descubre el regalito. En la alfombrilla de la puerta de su casa me defecaba yo para que aprendieran a pensar en los demás...
Aunque también podría ser que las farolas no se arreglen para que nadie pueda decir que el parque está descuidado. Ojos que no ven...
Un parque que ya se ha convertido en símbolo del derroche. De aquellos polvos con Yolanda Estrada vienen estos lodos. Primero se derrochó, se gastaron 140.000 euros en el Palustris maldito. Se nos vendió un Pozuelo verde y cuidado... disparando con pólvora del rey. Ahora.... ¿Qué ha quedado? Pues eso, desidia, descuido y heces.
Ulecia, arremángate, que en esta concejalía hay mucho que hacer y que limpiar.
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