Las mejores soluciones de aislamiento para el hogar

El confort en los hogares es un concepto fundamental. Podemos poseer la casa más amplia, luminosa y bien decorada del mundo, pero si es demasiado fría o deja pasar el ruido de la calle acabará perdiendo atractivo y resultará incómoda.

Y, ¿de qué depende el confort en un hogar? En buena parte depende de los aislamientos. Una casa bien aislada del exterior conserva mejor el calor interior, impide la entrada del viento y del frío y proporciona un plus de seguridad a sus habitantes. Además, contribuye a disminuir el consumo energético.

¿Cómo aislar una casa?

Las empresas de cerramientos proporcionan al cliente amplias opciones para mejorar el aislamiento de un hogar. Las zonas más sensibles son las puertas y ventanas, por las que se puede llegar a perder una importante energía calorífica si no están convenientemente acondicionadas.

Los especialistas en la instalación de ventanas en Madrid recomiendan los modelos en PVC o policloruro de vinilo. Se trata de un material plástico muy resistente, con altas propiedades térmicas y aislantes. Además, es un muy versátil, apto para la construcción de puertas, ventanas y distintos tipos de estructuras.

Para que el poder aislante del PVC se perciba especialmente en las ventanas, debe ir acompañado de un vidrio de calidad con cámara de aire. De esta manera se garantiza la máxima estanqueidad contra la posible entrada de agua o viento procedente del exterior. Si las ventanas son antiguas y no ofrecen el aislamiento deseado, una forma de salir del paso es colocar burletes de goma para frenar las corrientes de aire.

Cerramientos de terrazas

Es otra forma de añadir un mayor confort a los hogares, y no hablamos solo de aislamiento del frío, sino también de un mayor aprovechamiento de los espacios. Las terrazas son muy apetecibles en verano, porque permiten disfrutar del aire libre sin necesidad de salir de casa, pero en invierno se convierten en un espacio inútil. Para poder sacarles el máximo provecho en todas las épocas del año, la mejor solución es construir un cerramiento. Las estructuras cerradas proporcionan un aislamiento perfecto frente al frío, y pueden abrirse en verano para permitir el paso del aire y el sol.

Los cerramientos pueden ser básicamente de dos tipos: de aluminio o de cristal. Las estructuras en aluminio presentan un perfil muy fino, lo que garantiza una gran entrada de luz natural. Además resultan elegantes y discretas en cuaqluier lugar, incluso en un jardín. Los cerramientos de cristal, por su parte, permiten levantar estructuras totalmente diáfanas, y son utilizados en las terrazas de Madrid para crear espacios exclusivos y acogedores.

Ventajas de los cerramientos

Al margen del aislamiento contra el frío, los cerramientos presentan otras múltiples ventajas:

- Mejoran la eficiencia energética de la casa: los sistemas de aislamiento evitan que el calor se pierda por las ranuras y permiten ahorrar energía. Lo mismo ocurre con el aire acondicionado en verano.
- Reducen los ruídos: los cerramientos proporcionan un aislamiento del ruido exterior (tráfico, voces, obras, etc.)
- Mayor espacio: en los pisos pequeños, el cerramiento de una terraza puede ser una solución para ganar espacio habitable.
- Limpieza: las estructuras cerradas impiden que la terraza se llene de polvo y suciedad.