El PSOE de Pozuelo existe. Miss Izquierdo no es un holograma
Reapareció miss Izquierdo. El PSOE de Pozuelo existe. Según he leído en Diario de Pozuelo, por fin la desconocida líder socialista de este pueblo ha reaparecido pidiendo guerra. Como las gaditanas de la libertad, y usando en plural mayestático, ha dicho: «Queremos recuperar el espíritu democrático» . Y, la verdad, a mí casi se me cae el peluquín de gozo.
¿A qué se debe esta repentina eclosión democrática de la mudita?
¿Acaso Leire Pajín le ha puesto las pilas y le ha dicho que se suelte el pelo (dicho sea sin segunda intención) porque estamos en campaña electoral y hay que hacer algo por el partido?
¿O se debe, tal vez, a un arranque de valor tras una noche de insomnio y lecturas liberales prohibidas?
No lo sé ni me importa. Sólo sé que la voluntad de recuperar el espíritu democrático en Pozuelo, mostrada por miss Izquierdo, es digna de encomio. Siempre es bueno recuperar el espíritu democrático. Y, cuando ese deseo viene de la izquierda, debe ser acogido, incluso, con alborozo.
El problema es que para recuperar el espíritu democrático de un pueblo lo primero que se exige es saber qué significa tan digno concepto y, por lo realizado hasta ahora, me temo que miss Izquierdo lo desconoce.
Para que creamos, de verdad, que la desconocida líder quiere recuperar el espíritu democrático en Pozuelo lo primero que tiene que hacer es salir a la calle. A dar la cara. No se esconda más entre las siglas del partido, miss Izquierdo. Abra las ventanas de ese partido mohoso que mantiene en este pueblo y al que el sectarismo está devorando y deje entrar la luz de la democracia. Respete a los medios de comunicación. Hable para todos los pozueleros y no sólo para su secta, que, a este paso, es en los que se va a convertir el partido socialista de este pueblo. Tiene una oportunidad única. Nunca encontrará más tocado al PP de Pozuelo que en este momento. No haga lo mismo que ellos. Si el PP de Pozuelo se auto-pregunta, que el PSOE no se auto-responda. Hable, mudita. Hable.
De lo contrario, absténgase de hacer frasecitas monas y siga siendo La Bella Durmiente de Pozuelo.
Otro si, digo: Con ánimo de entrar en polémica, que el debate siempre ha sido fuente de conocimiento y diversión, le digo a Jacobo de María , mi compañero de columnas, que está en su derecho de criticar mis artículos pero que, cuando lo haga, no apunte y luego pase por encima con más pena que gloria. Que no toree de salón. Que si piensa que no llevo razón al calificar a los políticos de Pozuelo como menores, lo haga con razonamientos y no escurriendo el bulto con comparaciones y evasivas. De lo contrario, que calle para siempre.
Este diario no asume como propias las opiniones difundidas a través de las colaboraciones y cartas al director que publica
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